‘’ Se hace campaña en poesía y se gobierna en prosa’’
Todo está
consumado y Gustavo Petro es presidente electo de Colombia. La izquierda de
América Latina se consolida castigando a la clase política tradicional con una
diversidad de líderes que trazan una nueva senda para el futuro de la región. Petro
y el joven presidente Gabriel Borich de Chile tienen muchas coincidencias ideológicas.
La prosperidad económica basada en petróleo y cobre, pilares de crecimiento en
Colombia y Chile, busca dar paso a un frente unido donde el cambio climático se
convierte en prioridad. Un camino contrario a la fallida revolución en
Venezuela dependiente del crudo.
La llegada
al poder ha sido posible gracias al apoyo de los jóvenes, mujeres, comunidades
LGTB y afros. Igualmente, refleja la transformación social donde los
movimientos feministas han llevado a la despenalización del aborto, el derecho a
la eutanasia y el matrimonio entre parejas del mismo sexo. La pandemia muestra
la transformación de la política trayendo pobreza y mayor desigualdad como
caldo de cultivo para el cambio.
La historia
de Colombia va a cambiar. La pregunta es si será para bien y si no habrá
revanchismos y si la senda de crecimiento beneficiará a los más pobres como es
la promesa del elegido mandatario. Petro hasta hoy no proyecta confianza dado
su pasado subversivo, una campaña marcada por la deslealtad, la guerra sucia
del todo vale con personajes de dudosa ética y cuestionados. Asimismo, su paso
por la alcaldía de Bogotá mostró sus debilidades como administrador eficiente.
A nivel
internacional, la relación centenaria con los Estados Unidos que le ha
permitido a Colombia recibir miles de millones dólares en ayuda para combatir
el narcotráfico, podría verse amenazada pues los grupos ilegales, llámense
disidencias de las FARC. Ejército de Liberación Nacional y el poderoso Clan del
Golfo no renunciarán a su lucrativo negocio. Petro argumenta que las políticas
antinarcóticos de las últimas décadas han sido un fracaso y quiere concentrarse
en la sustitución de cultivos. Cuántos campesinos darán el paso?
El reinicio
de relaciones diplomáticas con Venezuela en poco o nada aportarán hasta cuando
el régimen de Maduro decida combatir los campamentos de los irregulares en la
frontera con Colombia. Las fuerzas bolivarianas están cooptadas por el dinero
del narcotráfico. Entretanto, Seguirán llegando ciudadanos de ese país a
Colombia en busca de un mejor futuro. Qué le aporta Maduro al proceso de paz
permitiendo que Iván Márquez y su grupo permanezcan en territorio venezolano
impunemente?
La promesa
de cambiar las costumbres políticas riñe con la llegada a la presidencia del
congreso de un camaleón de la clase tradicional que tampoco genera credibilidad.
Un animal político sin reato de conciencia ética. Imposible olvidar las
estrategias nada limpias que sugirió para que el entonces candidato llegara a
la presidencia. ‘’ Corrupto y nefasto ‘’ fueron las palabras de Gustavo Bolívar
uno de sus más fieles alfiles, El fin de lograr que las propuestas pasen en el
legislativo justifica los medios para lograrlo?
Francia
Márquez compañera de fórmula vicepresidencial, una mujer de méritos, pero muy controvertida
tiene enfrente un reto para que su región de mayoría indígena pueda liberarse
del cultivo y comercio de drogas. Un territorio ingobernable El Pacífico
colombiano que masivamente sumó al triunfo tiene en Márquez la responsabilidad
de mejorar las condiciones de vida y progreso. El aporte en términos del
producto interno es muy bajo por el abandono estatal y la falta de liderazgos. Será
la educación y el cambio de las costumbres las claves para que ello sea una
realidad?
La
confianza inversionista enfrenta su primera prueba con el anuncio del equipo
económico que despeje las dudas en torno al manejo macroeconómico. Colombia
viene creciendo por encima de sus pares de la región y el empleo se recupera,
aunque la informalidad persiste. La reforma tributaria anunciada deberá tener
en cuenta los actuales niveles que paga el sector formal de manera que no afecte
la inversión. Sin duda que una actualización del avalúo de las tierras es urgente,
así como una reforma agraria amplia.
Petro ha
llamado a todas las fuerzas políticas al ‘’Gran Acuerdo Nacional’’ concentrado
en asuntos de enorme trascendencia como los órganos de control, subsidios a los
más pobres, la independencia del banco central y el acuerdo de paz que ha
significado tan poco para las víctimas. Las elecciones nos muestran que hay dos
Colombias. Petro propone un gobierno del amor y de la vida, con justicia social
y ambiental. Mucha retórica bonita que el país espera no se traduzca en un
salto al vacío.